Unas pocas vísceras

Ya hace días que le vengo dando vueltas, he preferido no decir cosas en caliente ... primero por que voy de culo y segundo, por que resulta recomendable madurarlas.

Semanas atrás escuché como el señor Legina, que no levanta en mi ningún tipo de sentimiento, ni favorable ni despreciable, comentaba su visión del votante catalán, en relación a lo fustrante que debe ser tener que dar tu voto al señor Montilla, lo haga como lo haga ... por que la alternativa que te queda ... viene a ser peor (haciendo referencia al señor Artur Mas)

Lamento tener que darle la razón, pero me sorprende que salga de su boca, en primer lugar por ser tan socialista como lo es Montilla ... y en segundo lugar ... por no atraverse a decir, que lo igualmente lamentable, es tener la misma sensación cuando miras hacia la Moncloa.

Es lamentable, fustrante, triste, desesperanzador bla bla bla ... que, desde hace ya tiempo, muchos de nosotros nos dediquemos a votar tras un metódico ejercicio de cábalas ... pensando más en quien no queremos, que en quien queremos ... por puro descarte.

Es tan triste como ver como los políticos actuales se apoltronan es un trono, y se mueven por intereses ... nadando entre lodos populistas.

Y eso me lleva al amic conseller d'interior. Si sensible es la situación del incendio d'Horta de Sant Joan ... ver el esperpento de actuación, me resulta indiferente si tiene o no tiene razón, es lamentable la gestión de se ha hecho de este tema ...

Pero sigue más allá ... y se va a Ascó a dar lecciones medio-ambientales ... claro, típico de los señoritos de la capital (y ahí nos meto a todos) ¿Quienes nos creemos?

¿Quienes nos creemos? para juzgar a personas que tienen una dependencia absoluta de la central nuclear, cuyas tierras se han visto completamente devaluadas por tener la misma, ¿qué hariamos nosotros? que quien más y quien menos ha especulado los últimos años ... si de un día para otro todo lo que tenemos, todo por lo que has trabajado y sudado ... para que el "Senyor Jaume" de la Caixa de turno (como diría el extrañado Rubianes) no nos embargue ... se desvanece y deja de valer lo que valía ... por que ya nadie más que tú lo quiere.

Lo mejor de todo es que ese sacrificio, no obviemos que se trata de un SACRIFICIO, se realiza para que nosotros, los señoritos de la capital, mantengamos nuestro modo de vida, derrochador de energía ...

Mejor lo dejo, tengo claro que no soy quien para dar ejemplo, pero me apetecía "vomitar un poco mi ser".

Un abrazo,

Comentarios

Entradas populares